La vereda San Andrés de Busiraco está ubicada a 6 km de la ciudad de Neiva vía Bogotá, su clima es cálido, el suelo es árido, cuenta con poca vegetación y es un lugar desértico por la explotación de los recursos naturales (petróleo),. La economía se basa en la ganadería, el cultivo de cítricos y de cactus; en la zona no hay alcantarillado, no cuentan con gas y utilizan los pozos sépticos para el manejo de aguas negras. . Esta vereda es muy cercana a la capital por esta razón, no hay dificultad de transporte y acceso a ella, el pasaje cuesta $ 3.500 y se tarda aproximadamente 20 minutos en llegar.
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El centro educativo de San Andrés de Busiraco “NINA ANDRADE DE LIEVANO” es pequeño, cuenta con dos salones de poca ambientación, tres baños y un orinal, un lavamanos con cuatro llaves y dos tanques que proporcionan el servicio de agua por medio de bombeo que se realiza en un aljibe, considerándose no apta para el consumo. También tiene un restaurante escolar que brinda almuerzos a los estudiantes, la responsable de preparar los alimentos proporcionados por la fundación de la niñez y la adolescencia es la señora Lucrecia Hernández (Abuela de niños).
Tiene una sala de tecnología e informática con 6 computadores (2 servibles-4 inservibles), que es beneficiada del servicio de conectividad en banda ancha a internet gracias al programa COMPARTEL DESARROLLADO POR EL MINISTERIO DE COMUNICACIONES Y FONADE. Cuenta con instrumentos musicales (xilófonos, metalòfonos, guitarras, tambor) proporcionados por Batuta que les brinda clases de música los días lunes y miércoles. Hay un cuarto de Sanalejo “Chécheres” donde se guardan los materiales que tienen poca utilidad. Además posee una biblioteca que no es lo suficientemente adecuada para los niños.
La escuela cuenta con un parque infantil que se encuentra en malas condiciones y no satisfacen las necesidades lúdicas de los niños. El contexto ambiental de la escuela es relativamente desorganizado, ya que se visualizan elementos y herramientas en un espacio que no corresponden, es poco aseado, y cuenta con un jardín deteriorado por el descuido y falta de riego. Alrededor de ella, hay piedras grandes decoradas desde hace varios años, que hoy en día se encuentran descoloridas por el pasar del tiempo. En ellas se albergan las basuras ya que no hay un lugar destinado para depositarlas.
En cuanto a los recursos, la escuela económicamente cuenta con una canasta básica de aproximadamente $ 500.000 para el año utilizada en papelería, no dispone de material didáctico ni deportivo.
El modelo implementado es el de “Escuela Nueva” a través del trabajo con cartillas hasta cierto tiempo tornándose obsoleto y aburrido. El proyecto que actualmente desarrolla es de lúdica realizado en el tiempo del descanso y con horas determinadas. Años anteriores la ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE NEIVA se había comprometido con esta escuela en la regalía de árboles cítricos que iban a ser sembrados es sus alrededores, pero, por motivos ajenos no se ha llevado a cabo aquel proceso dejando como inconcluso el proyecto “Cuido y embellezco mi escuela”.
La jornada escolar se inicia a las 7:00 A.M, tiene un descanso de 10:00 A.M hasta 10:30 A.M donde aprovechan para comprar en la tienda (casa de una madre de familia) y finalmente las clases terminan a las 12:00 M.
El sistema de evaluación que maneja esta escuela es cuantitativo, donde evalúa los avances.
La escuela cuenta con 26 estudiantes de todos los grados de la básica primaria provenientes de nueve familias:
Preescolar: 2 niños
Primero: 5 niños
Segundo: 5 niños
Tercero: 5 niños
Cuarto: 4 niños
Quinto: 5 niños
Las relaciones dadas en la escuela son relativamente buenas tanto del maestro - alumnos y maestro- comunidad.
Los niños consideran a su maestro Carlos Alberto Suarez un buen docente, son hábiles en la representación gráfica, les gusta jugar fútbol, al escondite, la lleva, el desafío, y elevar de cometas. Ellos contribuyen en la limpieza y organización de la escuela barriendo, organizando mesas y lavando baños. Perciben la escuela como lugar de aprendizaje que no se da de acuerdo al ritmo de aprendizaje sino sujetos a las condiciones.
El presidente de la junta de acción comunal Darío Coqueco con 12 años de experiencia en el cargo ha trabajado en el mejoramiento de la escuela realizando gestiones para la construcción del restaurante escolar, 2 aulas, baños y brindando acompañamiento a los procesos de la comunidad.
Tiene buenas relaciones con los padres de familia y la comunidad de la vereda donde actualmente habitan aproximadamente 325 personas de 90 familias. Los habitantes se dedican al trabajo con el petróleo, minería rústica y la mayordomía.